sábado, 27 de julio de 2013

Hembristas contra JM Mulet



En un post sin pies ni cabeza, Silvia Alba, de Escéptica, la ha emprendido contra JM Mulet, muy al estilo hembrista, descontextualizando sus palabras:

Y para qué hablar de la tarea casi imposible de conciliar feminismo con escepticismo y salir del debate sin que te hayan llamado histérica o te recomienden tener más o menos relaciones sexuales. Pero cuando vemos normal o gracioso comparar el programa de Iker Jiménez con irse de putas, supongo que nuestro feminismo escéptico no ha calado lo suficiente en un movimiento (sigue sin gustarme esta denominación) tradicionalmente masculino.

Alba hace referencia a las palabras de Mulet, que fueron tuiteadas por Luis Gamez:



Mulet dijo eso en chiste, pero como buena doctrina autoritaria, el hembrismo no soporta el humor.

Ya tuvo que salir Mulet a defenderse de la acusación, ridícula, de Alba:



Así como los grandes escépticos han sido objetivos declarados de la Inquisición hembrista en la comunidad anglosajona, sólo era cuestión de tiempo que la franquicia hispanohablante de Rebecca Watson empezara a copiar el juego del victimismo.

Esto se vaticinaba desde cuando, por hacer una sencilla pregunta, fui recibido con cuatro piedras en cada mano, al igual que el acoso vía Twitter que recibieron varios lectores de este blog por la respuesta que le dí a Alba cuando pretendió seguir desacreditando la psicología evolucionista en un desafortunado post del día de los inocentes.

Lo peor de todo es la desfachatez que tiene Silvia Alba para hablar de cómo su 'feminismo escéptico' no ha calado lo suficiente. La pobre no se entera que el feminismo de igualdad ha calado bastante bien dentro del movimiento, pero que respuestas como "eres un machista" o "eso es mansplaining" (!) realmente son falacias, y ningún escéptico que se respete consideraría tomárselas en serio o pronunciarlas para defender ninguna postura.

En su Cruzada políticamente correcta e ideológicamente motivada, los hembristas han mostrado un verdadero desprecio por la libertad de expresión, odio a la disidencia, consideran que el acoso y el matoneo son tácticas legítimas, al igual que el victimismo, han convertido la carga de la prueba en "hiperescepticismo", pretenden abolir la presunción de inocencia y consideran aceptable que haya personas que pierdan sus empleos por tener opiniones (¡delitos de pensamiento!). Pues los escépticos hemos tenido suficiente de eso con la religión - no tiene nada que ver con que el movimiento sea "tradicionalmente masculino" o con el 'patriarcado' o la creencia de moda en los círculos de resentimiento viperino.

Cuidado escépticos, los hembristas están en la búsqueda de cualquier figura medianamente prominente con la que se puedan cebar cuando hayan terminado de leer en voz alta los comentarios de los trolls de sus sitios. José Miguel fue el primero, pero no me sorprendería enterarme que no es el último.

(vía Edgar Luis Gómez)

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