domingo, 22 de agosto de 2021

No, los psicodélicos no 'curan' el ateísmo



Recientemente, dos encuestas encontraron que el consumo de psicodélicos redujo el ateísmo de los participantes — los resultados fueron reportados enérgicamente en la prensa anglosajona. En español, la cloaca de desinformación RT se hizo eco de la nota, y Vice tradujo al español su artículo de que el DMT te hace creer en dios.

¿En serio — las experiencias psicodélicas pueden reducir el ateísmo? En este blog aceptamos los hechos, y si hemos reportado sobre las bases biológicas de la conducta, y los cambios en el nivel de creencia tras intervenciones con energía magnética o lesiones cerebrales, a priori no sería descabellado sugerir que el consumo de sustancias psicodélicas pudiera tener un efecto en las creencias del consumidor.

La cuestión, claro, es qué tan metodológicamente rigurosas fueron las encuestas, y qué tan responsables fueron los corresponsales de prensa que reportaron al respecto. Y aquí entramos a un todo un universo de sesgos de confirmación. Por ejemplo, la guinda del pastel vino por parte de una tal Rachael Petersen que reforzó la noción de que los ateos llevamos deprimentes vidas desprovistas de sentido al reportar que el consumo de psilocibina para tratar su depresión la 'curó' de su ateísmo.

La supuesta evidencia de que los psicodélicos disuelven el ateísmo de las personas llamó la atención del investigador Wayne Glausser, de la Universidad DePauw, quien publicó un artículo en en el journal Religions examinando el asunto. Glausser identificó tantos problemas con las encuestas que es difícil imaginar que alguien se las pueda tomar en serio.

domingo, 15 de agosto de 2021

La Justicia Social viene por la salud mental



Como la religión que es, la ideología de la mal llamada Justicia Social ha invadido todas las áreas de la vida humana — así como usurpó y subvirtió las comunidades atea y escéptica, la academia ha seguido una trayectoria similar y sin importar qué tan robusta sea una disciplina o campo del conocimiento, sería extraño si la Justicia Social no hubiera ya empezado a hacer estragos — lo ha hecho con la medicina de género juvenil, la biología evolutiva y hasta las matemáticas (por ejemplo, cuando Doctores de Matemáticas insistían en que no existe una realidad objetiva y que la suma de 2+2 bien puede ser 5); así que, sinceramente, no creo que quede una sola área del conocimiento que haya resistido efectivamente los embates de la sinrazón de siempre estrenando ropa.

Hay disciplinas académicas que tienen un mayor peso que otras. Por ejemplo, yo pensaría que la cantidad de daño que la Justicia Social puede hacer en la botánica es bastante menos devastadora de la que puede hacer en el derecho, la ingeniería, el periodismo, la pedagogía o la salud humana.

Y eso es lo que estamos viendo — hoy en particular, exploraremos cómo la Justicia Social está empezando a deformar la atención en salud mental. En un reciente artículo para Persuasion, la psiquiatra Sally Satel ofreció un vistazo a los cambios que la salud mental empieza a experimentar como disciplina, cuando los pacientes son tratados por activistas en vez de terapeutas:

miércoles, 4 de agosto de 2021

Cobertura de 'Science-Based Medicine' sobre "Daño Irreversible" incluyó 19 errores, afirmaciones falsas sobre tres investigadores, citas inventadas y un sinfín de desinformación



Esta es una traducción libre del artículo Science-Based Medicine's Coverage Of "Irreversible Damage" Included About 19 Errors, False Claims About Three Sex Researchers, Made-Up Quotes, And Endless Misinformation, por el periodista científico Jesse Singal, publicado originalmente el 19 de julio de 2021 en su columna Singal-Minded.