El lunes, El Espectador publicó la carta de una lectora llamada Sara Padilla Vivero, quien hizo una breve pero potente defensa del laicismo en su misiva, llamada Fiestas que no rezamos, con dineros que trabajamos:
Con su parroquial y pastoril concepto de "cultura", el ministerio de Cultura, en cabeza de Mariana Garcés Córdoba sigue patrocinando el cristianismo con dinero de los contribuyentes.
Por eso desperdició casi 5.000 millones de pesos restaurando las capillas San Pedro Apóstol de Togoima, San Antonio de Chinas, San Miguel de Avirama y Santa Rosa de Suin en Tierradentro (Cauca):
IYF es una organización que se dedica al reclutamiento de jóvenes en el cristianismo, vendiéndoles la idea de que les van a enseñar inglés y los van a hacer líderes (¿hay algo más risible que ovejas siendo prometidas que serán líderes?).
El Facebook de la oficina de Latinoamérica los describe así:
Hace unos días los fundamentalistas católicos sacaron todo el arsenal jurídico para censurar 'Mujer en custodia' (también llamada 'Mujeres ocultas'), una obra de arte que no les gusta.
La pataleta no había prosperado, hasta que el Tribunal Administrativo de Cundinamarca suspendió la exposición:
Parece que en el Ministerio de Cultura vendrían bien unas clasesitas sobre laicismo. A ellos como que se les da fatal entender que un Estado moderno, del siglo XXI y con una Constitución laica, no promueve de ninguna manera nada que tenga que ver con entes sobrenaturales.
Afortunadamente para ellos, pueden contar con el Gobierno. Resulta que se hicieron dos consultas, una con una firma alemana y la otra con una catalana. La germana fue pagada por la Curia, y la otra... mejor enterarse con las palabras de la ministra de Cultura, Mariana Garcés: