
Por el desprecio al conocimiento de François Hollande, los científicos franceses le han escrito la siguiente carta abierta:

Cuando todavía era presidente, el gobierno de Sarkozy le pidió a la Unión Europea que rechazara el maíz transgénico y para ello aprotó documentación fraudulenta, verdades a medias y estudios poco serios - la típica documentación antitransgénica.