Entre toda la superstición que rodeó la muerte de Hugo Chávez, él mismo y su sucesor se han encargado de promover la teoría conspiranóica de que el gobierno estadounidense causó el cáncer (!).
Pues en Scientific American quisieron saber qué tan probable habría sido esto y por ello le hicieron una entrevista a Katherine Belov, experta en cáncer transmisible entre demonios de Tasmania: