En Colombia, muchos charlatanes defienden la venta de sus productos asegurando que cuentan con un registro sanitario del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), lo que es inducir a error, pues el Invima sanciona productos peligrosos pero otorga registros sanitarios a productos inocuos.
O sea, el Invima no prohibirá un producto homeopático porque el agua con azúcar no hace nada y como no hace nada, tampoco puede causar daños directos a la salud — eso no significa que la homeopatía funcione. Este criterio, algo mediocre, conlleva un vacío legal que los escépticos hemos criticado: el Invima no sólo debería evaluar por inocuidad sino también asegurarse de que los productos cumplen con lo prometido (junto con las buenas acciones de la SIC, esto significaría una doble protección para el consumidor).
Este lunes el Invima lanzó una alerta sanitaria nacional por productos 'milagro' — o sea que estos productos representan un peligro efectivo para la salud: