Mientras que la gobernación de Antioquia paga miles de millones de pesos para la reconstrucción de un templo a la ignorancia, sus ciudadanos deberían saber que esta práctica de desperdiciar el dinero de los contribuyentes es algo común y corriente en todo el departamento.
Ahora resulta que la Contraloría departamental pretende combatir el estrés de sus funcionarios con pseudociencia, mientras que en el Concejo de Medellín se dan la buena vida:
Ahora resulta que la Contraloría departamental pretende combatir el estrés de sus funcionarios con pseudociencia, mientras que en el Concejo de Medellín se dan la buena vida: