miércoles, 25 de enero de 2012

Así empieza la MANE este año...

En mi calidad de estudiante colombiano he dejado meridianamente claro que nunca, jamás de los jamases me he sentido identificado ni me identificaré con la Mesa Amplica Nacional de Estudiantes (MANE).

De hecho, su discurso trasnochado, impregnado de un sindicalismo perezoso y entusiasta con paralizar al país, es la mejor muestra de que nadie que se precie de ser un estudiante en uso de sus facultades críticas querría ser vinculado con la dichosa MANE.

Aquí hay una editorial de un tal Leonardo León sobre sus perspectivas para este 2012. Analicémosla por un momento:

¿Qué equipo apoya Zeus?

Uno de los privilegios religiosos es que sin hacer nada, con sólo sembrarle miedo a las personas desde pequeñas, los mensajeros de los amigos imaginarios consiguen publicidad gratuita.

Es lo único que consigue publicidad gratuita. Ayer fue en la revista Diners y hoy es en RCN, con su "especial" deportivo Los Apóstoles del Fútbol:

¿Samper, "experto en temas humantiarios"? ¿En serio?

El ex presidente Samper (al igual que cualquier ex presidente) nunca ha contado con mi entusiasmo ni apoyo. Desprecio al tipo por varias razones, una de ellas: haber llegado al cargo con dinero de la mafia. Otra: haber inaugurado la Catedral de Sal de Zipaquirá como potencia turística de Colombia, un país que la Constitución presume laico. Y hay otras, algunas de las cuales no puedo probar y que prefiero reservarme.

Ahora, (al igual que cualquier ex presidente) Samper cree que tiene opiniones relevantes e interesantes sobre la actualidad del país. Pues no:

El mal que ha durado cien años

El dicho es que "no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista", pero existen varios males que ya superan el siglo.

Digamos que los primeros males que duraron cien años (y más) son los tres grandes monoteísmos. Ya llevan sus buenos siglos. Yo pensaba que el siguiente mal en cumplir los cien años sería la guerrilla terrorista de las Farc, pero me equivoqué. Esta semana ingresa a esa especial lista la prueba más fehaciente de que el asqueroso puritanismo religioso ha permeado nuestras sociedades y leyes:

Comentarios sobre el discurso del Estado de la Unión

Barack Obama no es santo de mi devoción. Desde hace un buen tiempo mi impresión sobre el actual presidente de los EEUU ha sido la de Ezra Klein: Obama es un republicano moderado de los 90.

Por eso, y debido a que este año se define si el mundo queda en sus manos o a la merced de alguno de los idiotas lunáticos del partido republicano es que considero que su discurso sobre el Estado de la Unión de este año es muy importante.

Aquí algunos comentarios:

martes, 24 de enero de 2012

Gracias dios por la existencia de la religión

Vamos a ver. Esto es un experimento. Por supuesto no es que yo agradezca la existencia de la superstición organizada, sin embargo tengo motivos para escribir eso.

Quiero ver si entendí bien cómo funciona esto. Resulta que Ariane Noelle Patterson, al cumplir 21 años le agradeció a dios por otro año más de vida y luego murió:

También hay depredadores sexuales evangélicos

Si portar armas está prohibido porque es muy fácil que lleven a la muerte de alguien, también deberían estar prohibidas las religiones. No sólo está comprobado que llevan a la muerte a miles y millones de personas.

También son plataformas ideales para que los líderes religiosos, alrededor del planeta, abusen de sus fieles. Como lo hizo Geraldo Pereira Nunes en Brasil:

Retazos de Lógica: Argumentum ad ignorantiam

Un lector me pide que escriba un artículo sobre el argumento desde la ignorancia. Pues bien, aquí está.

El argumento desde la ignorancia, o ad ignorantiam es una falacia que...

Mis amigas me conocen muy bien

En Facebook, una de mis mejores amigas me acaba de compartir esto:

lunes, 23 de enero de 2012

Desfile esotérico en la Revista Diners

La edición de diciembre de la revista Diners vino cargada de superstición a más no poder.

En su sección de Tendencias se les van 26 páginas con testimonios de personas (colombianos) que han abrazado diferentes creencias supersticiosas, cada una más falaz e ilógica que la anterior.