Alguna vez, recién me volví ateo, en un paseo a Paipa me encontré con un cristiano que era profesor en una escuela pública y se enorgullecía de haber convencido al rector para permitir oraciones en la escuela.
En ese entonces me pareció terrible y me lo sigue pareciendo y tengo la impresión de que el adoctrinamiento en la superstición judeo-cristiana en las aulas es algo que los rectores de colegios públicos se toman la separación entre las iglesias y el Estado, cuando no es que lo ignoran por completo.
Ahora, alguien de la Organización Colombiana de Ateos (ORCA)
se encontró con que a su hija de tercer grado le dictan una materia llamada "Religión y Valores" (un nombre que sería como "Totalitarismo y Democracia") y que entre los útiles escolares que piden para este año se encuentra una "biblia pequeña":