Con los casos del
crucifijo en la Corte Constitucional y las
oraciones en Cartagena, los medios empiezan a fijarse en el laicismo como tema. Lo chistoso es que lo tratan como si fuera un tema de opinión, y no de hechos.
Y precisamente esa discusión tuvo lugar en el segmento
Sí o No de
Noticias RCN, dirigido por
José Manuel Acevedo — la pregunta fue si
deberían prohibirse los símbolos religiosos en las instituciones públicas. Por el "Sí" fue invitado mi amigo
José Fernando Flórez, quien desde el principio dejó claro que no es un tema sujeto a debate. Los
símbolos religiosos están prohibidos en las instituciones públicas.
Por el "No" fue invitado el odioso
Iván Garzón, un tipo a sueldo del Opus Dei, cuya función en la vida es defender el privilegio religioso católico en cuanto medio de comunicación pueda — aquí
ya hemos hablado sobre ese señor, quien defiende que el Estado favorezca creencias religiosas (y,
ohh, casualidad, en un país como Colombia, la mayoría de veces la favorecida va a ser la Iglesia Católica) recurriendo al victimismo y el relativismo cultural —ese que su Iglesia dice odiar, pero que usa con desparpajo cuando le conviene—.
Esta vez no fue la excepción: