Las personas religiosas, en especial los clérigos, siempre afirman que hacen tal o cuál cosa porque dios lo manda o buscan ocultar sus prejuicios respecto a un tema, alegando que esa posición es la de su amigo imaginario.
En ocasiones en que algún miembro del rebaño se siente traicionado, eso le puede costar la vida al clérigo de turno, como le pasó a un rabino:
En ocasiones en que algún miembro del rebaño se siente traicionado, eso le puede costar la vida al clérigo de turno, como le pasó a un rabino: