Como recordarán, el sábado se llevó a cabo la Tercera Reunión Atea en Bogotá.
Este es mi recuento del suceso. Primero, llegué a la 1 p.m. a Plaza 39, en donde había quedado con Fengar para vernos, almorzar y después caer juntos a la reunión. Como no podía ser de otra forma, nuestro almuerzo fue extremadamente blasfemo y hereje, carne roja, satisfaciendo a plenitud el hambre:
Este es mi recuento del suceso. Primero, llegué a la 1 p.m. a Plaza 39, en donde había quedado con Fengar para vernos, almorzar y después caer juntos a la reunión. Como no podía ser de otra forma, nuestro almuerzo fue extremadamente blasfemo y hereje, carne roja, satisfaciendo a plenitud el hambre: