Hace unos meses supimos de una demanda a la ley de Laura Montoya, para que fuera declarada inconstitucional ya que, una santa católica sólo es de importancia para sus correligionarios y al resto de ciudadanos nos trae sin cuidado.
La ley fue demandada por segunda vez y yo participé con una coadyuvancia de la demanda en la que respondí a los 'argumentos' (llamémoslos así) que los religionistas esgrimieron la primera vez. Aquí un extracto: