Muchas, si no todas las
críticas que he hecho al proceso de 'paz' se han dirigido exclusivamente hacia las actuaciones y omisiones del Gobierno — esto no es casualidad: primero, porque, me guste o no, el Gobierno me representa; y segundo, porque, para mí, los grupos terroristas no merecen más atención que la de las FFAA y la de los tribunales.
Pero, tal como van las cosas, parece que los terroristas obtendrán su impunidad y podrán participar en política (al fin y al cabo un entorno propicio para criminales). Aunque jamás votaré por ninguno de ellos, sí cabe preguntarse cómo sería un político venido de un grupo terrorista —
en cuanto a laicismo parece que serán políticos tradicionales, violando la Constitución.
Esa es la conclusión que puedo sacar de la carta que el cabecilla terrorista '
Timochenko' le envío al
papa Frank, en la que le
pide que la Iglesia participe más en la política colombiana: