Sabemos que dios no cura a los amputados; pero la ciencia sí.
Esta es la historia de Buttercup, un patito que nació con un pie deforme y apuntando hacia atrás. Fue trasladado al santuario Feathered Angels Waterfowl en Tennesee, cuyos empleados decidieron ayudarlo. El pie fue amputado, y luego la bondadosa gente del Santuario se puso en acción: