sábado, 2 de febrero de 2013

El crimen sí paga


Mientras el Gobierno pacta la impunidad con las Farc, los cabecillas negociadores viven rodeados de lujos burgueses en La Habana:

Desde que se iniciaron los primeros contactos directos en La Habana, entre el Gobierno del Presidente Juan Manuel Santos y las FARC, el gobierno dispuso, que ambas delegaciones se hospedaran en el conjunto de El Laguito, un lujoso conjunto residencial construido finales de los años 20, del siglo pasado conocido como El Laguito. Esta situado en las afueras de La Habana y allí vivían los empresarios azucareros en la época de la dictadura de Fulgencio Batista y estas casas fueron las primeras en ser expropiadas por el gobierno de Fidel Castro cuando ganó la revolución en 1959. Los dueños de estas casas emigraron y viven en la Florida.

El lujoso conjunto fue construido bajo la dirección del entonces ministro de obras públicas Carlos Miguel De Céspedes y formaba parte del proyecto residencial de Miramar. Inicialmente se llamó el Country Club y contaba con campo de golf, club hípico, zona residencial, lago artificial y hotel. Las construcciones de la zona residencial son amplias mansiones de estilo neoclásico, art decó y colonial californiano.

Hoy el Barrio donde esta el Laguito se llama Cubanacán y en total son 120 casas, que tienen entre una y seis habitaciones, todas completamente amobladas y con servicio domestico y chofer con limosina, que atienden a los huéspedes de lo que han denominado Casas de Protocolo que están numeradas y cuentan con un estricto servicio de vigilancia, directamente ligados al Ministerio del Interior, que garantizan la seguridad y privacidad de los huéspedes.

Yo no he asesinado a nadie, sembrado minas antipersona, reclutado menores de edad, ni secuestrado a nadie - ¿dónde está mi viaje a Oslo y mi club campestre con piscina y campos de golf en medio del Caribe? ¿Por qué los terroristas reciben este premio? ¿Acaso no es suficiente con permitirles limpiarse el trasero con el código penal y la Constitución?

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