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jueves, 8 de septiembre de 2011

¡No marché por la educación y me enorgullezco!

Ayer hubo una marcha en Bogotá por la educación. Algunos quisieron hacerla ver como si fuera lo mismo que está pasando en Chile y forzaron similitudes inexistentes. No fue lo mismo que en Chile y no lo será.

Por varias razones:

miércoles, 8 de junio de 2011

La Declaración de Dublín

Del 3 al 5 de Junio tuvo lugar en Dublín la Convención Mundial Atea 2011.

Allí nació la Declaración de Dublín sobre el Laicismo y el Lugar de la Religión en la Vida Pública, que traduje y copio a continuación:

martes, 19 de abril de 2011

La decana se rajó

Leo en El Espectador la entrevista que le hacen a Antonia Agreda, indígena doctorada en el país y actual decana de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional Abierta y a Distancia (UNAD).

Algunas de sus respuestas me sorprenden:

¿Cuál es el mayor objetivo de la etnoeducación?

Garantizar una educación más acorde con la realidad cultural y lingüística de los grupos étnicos del país. Es el avance en la construcción de nuevos conocimiento basados en el diálogo de saberes.

Sólo hay un conocimiento, que se construye a través del método científico. Por más condimentos culturales que traten de imponerle, el conocimiento y el saber no dependen de la etnia tal o cual.

¿Qué tan poderosa puede ser la medicina ancestral?

La medicina ancestral tiene varios niveles, su poder está en la gran posibilidad que tiene en la armonización del cuerpo, la mente y el espíritu.

Una persona que está a cargo de una facultad de una universidad no debería hablar así. La respuesta correcta corta es esta: "no se sabrá hasta que no se hagan los correspondientes experimentos científicos que avalen o no su poder. Hasta entonces no es acertado llamarla medicina".

Su mejor experiencia espiritual.

Dos momentos: cuando inicié en el Putumayo con mi Taita Mayor cofán la toma de yagé y cuando conocí la historia mexicana de la Virgen de Guadalupe.

¿Está admitiendo que es una consumidora activa y constante de una droga psicoactiva que desestabiliza el sistema nervioso central?

Religión y drogas. Solas, son poco recomendables. Mezclarlas me parece una de las peores ideas que pueda pasar por la cabeza de alguien.

lunes, 11 de abril de 2011

Colombia, Banana Republic: Educación y Trabajo en la Cárcel y otras consideraciones

Colombia es un país que se ha caracterizado por tener altos índices de criminalidad pero muy bajos índices de educación.

Hace unos días comentaba con una amiga el tema del estudio y el trabajo en la cárcel como beneficios para reducir la condena. Así que es una total coincidencia que ahora se anuncie un 'revolcón' a los beneficios carcelarios por educación y trabajo y, por supuesto, siguen enfocándolo mal:

El ministro del Interior y de Justicia, Germán Vargas Lleras, explicó que principalmente se propenderá que los beneficios que reciben los detenidos por trabajo y estudio sean controlados.

La idea es que se cree un estricto sistema de redención de penas por estudio, basado en logros y no simplemente en horas de asistencia.

"En el futuro sólo el interno que obtenga los logros en los distintos programas académicos podrá ser beneficiario de redenciones de penas por estudio", explicó.

Eso es un error del tamaño de una catedral. Probablemente muchos de los internos terminaron en las cárceles por falta de oportunidades y aquí las están presentando una vez más como si fueran alguna especie de trofeo, al que sólo unos cuantos pueden acceder. Estudiar y trabajar deben ser obligatorios.

Este es un país que tiene servicio militar obligatorio. ¿Por qué cargar armas y seguir órdenes de una manera completamente acrítica es obligatorio mientras que se deja como opcional y voluntaria la mejoría personal que a la vez puede prestar cierto adelanto a la sociedad?

No debería existir ninguna exención ni beneficio por estudio o trabajo. Ni siquiera con buenas o malas calificaciones. Lo que debería haber es un régimen educativo y laboral para todos los reos.

De esta forma es probable que se redujera la reincidencia en algún grado y que la rehabilitación -que es lo que se supone que hacen las cárceles- empezara a cobrar una mínima vigencia -que ya sería algo-.

Pero no. Este país siempre ha sido mezquino y renuente a darle a los más necesitados las herramientas necesarias para salir adelante: se planea reformar la Ley 30, con lo que empieza el proceso de privatización de la educación y se está impulsando la Ley Lleras que busca frenar el libre acceso al conocimiento y la cultura. Con este nuevo Código Penitenciario hacen la tripleta: sigamos aumentando la brecha social.