¡Oh-oh! La Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (International Agency for Research on Cancer, IARC) lo ha hecho de nuevo — a finales de junio publicaron su clasificación del aspartame en la categoría 2B, "posiblemente cancerígeno para los seres humanos", y no hubo escasez de notas periodísticas advirtiendo sobre el endulzante artificial. No es la primera vez que la IARC induce a error al público general, y dudo mucho que sea la última.
Hace unos años, en su infinita sabiduría, la IARC clasificó el glifosato como 2A, "probable cancerígeno", después de un reporte interno con tantos errores metodológicos como para detener un tren. Desde entonces, las agencias de salud pública de medio mundo han sometido la sustancia a una batería de rigurosos tests y pruebas que no han encontrado nada que respalde clasificar el glifosato como "probable cancerígeno". En otro momento, la Agencia también hizo lo mismo con las carnes rojas y procesadas, instigando el pánico de manera innecesaria.
Algunas voces sensatas han críticado la taxonomía empleada por la IARC, por ser innecesariamente confusa. En resumen, la Agencia busca responder preguntas filosóficas sobre peligro absoluto, y no de riesgo relativo a cantidad de exposición o dosis. Siguiendo la lógica de la IARC, el agua es tóxica porque su consumo causa muerte por sobredosis — algo que es completamente cierto... y nunca entra en la ecuación el hecho de que uno tendría que beber carrotancados de agua en un muy corto espacio de tiempo para llegar a ese escenario.
Por este motivo, razón no le falta a quienes aseguran que la clasificación de la IARC es engañosa. La Agencia sólo tiene cuatro categorías: lo no clasificable, lo posible cancerígeno, lo probable cancerígeno, y lo cancerígeno. En las categorías 2B "posible cancerígeno" y 2A "probable cancerígeno" hay un sinnúmero de actividades y productos de la vida cotidiana que no representan ningún riesgo cancerígeno en absoluto: el café, los teléfonos móviles, el extracto de ginkgo biloba el extracto de aloe vera, los vegetales conservados, el carbón de leña, ser carpintero, trabajar en una lavandería, ser bombero y ser peluquero.
Cuando alguien que no está familiarizado con el tema encuentra con que la Agencia de la OMS que investiga el cáncer clasificó una sustancia de consumo masivo como el aspartame en la categoría de "posiblemente cancerígeno para los seres humanos" seguramente se alarme... a pesar de que esa es la clasificación más leve con la que cuenta este organismo intergubernamental. ¿Acaso es absurdo que una persona común y corriente suponga que existe una clasificación de "probablemente no cancerígeno" o algo similar?
Para rematar, el aspartame ha sido estudiado durante décadas por parte de investigadores independientes, de la industria y de esas molestas agencias de salud pública, y hasta el momento la mejor evidencia disponible coincide en que no hay una relación causal entre el consumo de aspartame y desarrollar cáncer. De hecho, el aspartame ha sido estudiado hasta el cansancio y no se ha encontrado que cause ningún malestar (salvo en las personas con la mutación genética fenilcetonuria, también conocida como PKU, porque no pueden metabolizar apropiadamente la fenilalanina).
Los endulzantes artificiales como el aspartame han abierto la puerta a que las personas podamos disfrutar más saludablemente de productos que hasta no hace mucho sólo tenían presentaciones con cantidades industriales de azúcar añadida. Seguramente, la torpe clasificación de la IARC y su más que inasertiva comunicación llevarán a que un segmento de la población incremente drásticamente su consumo de azúcar con tal de evitar el aspartame. Y da la casualidad de que, aunque el azúcar no causa cáncer directamente, sí contribuye a la obesidad (que es un factor de riesgo de cáncer).
Y mientras la IARC se va lanza en ristre contra el aspartame, la triste realidad es que este desacierto también tendrá un costo en víctimas humanas.
(vía Alan Aragon | imagen: Robert Stump)
____
Publicado en De Avanzada por David Osorio | ¿Te ha gustado este post? Síguenos o apóyanos en Patreon para no perderte las próximas publicaciones
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.