En medio del proceso de impunidad que el Gobierno lleva a puerta cerrada con los terroristas, el ministro del Interior, Fernando Carrillo, salió a defender el proceso, diciendo que "lo fácil sería exterminar la subversión", dando a entender que el Gobierno se rehúsa a tomar los caminos fáciles y prefiere lo complejo como sinónimo de lo correcto.
Pues lo siento, pero la evidencia apunta a lo contrario. Desde que estaba en campaña, Juan Manuel Santos y sus actos han estado marcados por hacer todo de la manera más fácil y conveniente.