En enero de 2015, el sacerdote católico Jose Palimatton fue arrestado por mostrarle pornografía infantil a un adolescente después de la misa y enviarle un mensaje de "dulces sueños" por la noche — su colega, el sacerdote John A Gallagher lo denunció ante la Policía.
Ahora, Gallagher está siendo castigado por la Diócesis de Palm Beach (Florida), por haber reportado el caso a las autoridades en vez de simplemente hacer los trámites de cambio de parroquia y devolver a Palimatton a India: