Una tendencia nociva alrededor del mundo es
creer que las leyes pueden ignorarse por motivos religiosos (o de creencias). Por ejemplo, en EEUU, a pesar de que las fotografías para documentos de identificación prohíben una gran variedad de accesorios, los cristianos se toman las fotos con crucifijos y los musulmanes y sikh usando el turbante, a pesar de que eso entorpece el proceso de identificación y dificulta el buen funcionamiento del
software de reconocimiento facial.
Sin embargo, cuando los practicantes de religiones minoritarias quieren el mismo trato por parte de las autoridades, resulta que estas ya no son tan dadas a "respetar las creencias ajenas" — así lo
vino a descubrir un hombre de Portland (Oregon):