Seguramente los posmodernos no aceptarán esto (al fin y al cabo es evidencia, ¿por qué habrían de aceptarla?), sin embargo las tiendas naturistas, esos templos de humanidad y desprendimiento material, de rechazo a la avaricia de la industria farmacéutica y el monopolio de la medicina occidental, ejemplos morales de preocupación y altruismo están vendiendo Fruta Planta, el producto natural que se cobró la vida de una estudiante.
El hecho de que vendan productos que no han superado los más básicos controles de calidad y sanidad siempre puso de manifiesto algo que ahora se revela como obvio - que a las tiendas naturistas poco o nada les importa la salud de sus clientes:
El hecho de que vendan productos que no han superado los más básicos controles de calidad y sanidad siempre puso de manifiesto algo que ahora se revela como obvio - que a las tiendas naturistas poco o nada les importa la salud de sus clientes: