Cuando me quejé de que la empresa encargada de la inscripción al TEDxBogotá hiciera pasar la pseudociencia como algo respetable, nunca me imaginé que la conferencia de hecho fuera a tener ese tufillo magufo (incluso por Twitter, me habían dicho que no iba a haber "conferencias de eso").
Al recibir el programa, mi principal preocupación fue el espacio de Gonzalo Sarmiento porque lo describían como alguien "con gran interés en los Biocultivos" y pensé que se iba a poner en plan GreenPeace-ecotalibán a difundir mentiras de los transgénicos y los pesticidas. No fue así. De hecho le interesan los biocultivos y fue de lo que habló.
Pero antes que él vino Catalina Salguero, cuya conferencia abrió la sesión y no puedo describir sino como los veinte minutos más tortuosos de escuchar a alguien.
Al recibir el programa, mi principal preocupación fue el espacio de Gonzalo Sarmiento porque lo describían como alguien "con gran interés en los Biocultivos" y pensé que se iba a poner en plan GreenPeace-ecotalibán a difundir mentiras de los transgénicos y los pesticidas. No fue así. De hecho le interesan los biocultivos y fue de lo que habló.
Pero antes que él vino Catalina Salguero, cuya conferencia abrió la sesión y no puedo describir sino como los veinte minutos más tortuosos de escuchar a alguien.