Como buen populista, el expresidente Álvaro Uribe se pasó por la secta de Avivamiento para hacer la típica demagogia de campaña. Y de lo que uno se entera:
El expresidente durante su intervención, saludó a los asistentes y afirmó que las elecciones de en las que el fue candidato y ganó se debió a la participación de la iglesia y de sus seguidores en los puestos de votación.
El exmandatario Uribe expresó que “la Iglesia ha ayudado mucho en mi carrera pública y les debo mucho. Ayudaron a mi elección en el Senado, en la Gobernación de Antioquia y ayudaron en mis dos elecciones a la Presidencia de la República. Vivo en deuda con la iglesia”.
El jefe de la iglesia afirmó que durante una visita a capital de Antioquia, que conoció la hijo de Isabel Sofía Cabrales y Tomás Uribe. Además puntualizó que los colombianos deben escuchar a al expresidente Uribe porque es una “voz profética”.
Ohh, genial. Como si no hubieran hecho suficiente por expandir la ignorancia, el sufrimiento, la intolerancia, el dolor y la miseria, amplificaron todo eso con la elección de Uribe. ¡No, pues gracias! Uribe vive en deuda con la iglesia y la iglesia vivirá en deuda perpetua con Colombia, deuda que no podrá pagar ni con todos sus diezmos.
Sí, claro, "Uribe es profético", como cuando 'profetizó' que no podría comprar a la Corte Constitucional para que permitieran que cambiara la Constitución en su nombre por segunda vez... ohh, wait - no lo hizo e intentó comprarla.
O como cuando en vez de predecir, mandó hacer escuchas ilegales a la oposición para saber qué planeaban, violándoles en el proceso sus derechos humanos.
O cuando no pudo acabar con las Farc, algo que sería sencillo si realmente pudiera predecir lo que sea, y se demoró seis años encontrando a la ingrata de Ingrid Betancourt. ¿Que sería esa vez, problemas meteorológicos?
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