lunes, 8 de julio de 2013

Eres inocente hasta que se demuestre lo contrario...



... a no ser que seas un hombre acusado de violación:

Las mentiras de una trabajadora sexual llevaron a que Carlos Eduardo Ruiz Martínez fuera condenado por un supuesto abuso sexual y estuviera recluido durante 626 días. Las mentiras fueron reconocidas por la misma prostituta en un escrito enviado a la Fiscalía y confirmadas por otras evidencias obtenidas durante la investigación. Pese a ello, Ruiz Martínez fue sentenciado y apresado, perdió su empleo y su vida fue arruinada.

Quienes odian la feminidad, suelen ignorar este problema y además tienen el descaro de ir tan lejos como para acusarnos de "hiperescepticismo" a quienes tenemos la sana costumbre de exigir pruebas de cualquier afirmación (más aún de una tan grave como la acusación de violación).

Y esto es algo que yo no entiendo. ¿Por qué un feminista le daría validez a algo tan grave como una acusación de violación, sin ninguna prueba? ¿No es este tipo de procedimiento una forma de devaluar a las verdaderas víctimas de violación? Claro, por no decir nada de todos los pobres inocentes a los que encierran sin ninguna prueba.

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