El corto La inocencia de los musulmanes sigue consiguiendo que los enemigos de la libertad se muerdan los codos.
E incluso pagarían por su intolerancia, como es el caso de un ministro paquistanía, quien no se aguanta que su superstición sea cuestionada y promete pagar a quien asesine al autor:
E incluso pagarían por su intolerancia, como es el caso de un ministro paquistanía, quien no se aguanta que su superstición sea cuestionada y promete pagar a quien asesine al autor: