Hace unos meses, el Ministerio de Cultura ofreció la exposición 'Mujer en custodia' (luego renombrada 'Mujeres ocultas'). Grupos de católicos fundamentalistas intentaron censurar la exposición, argumentando que ofendía sus creencias (¿y qué si lo hacía?) y consiguieron que el Tribunal Administrativo de Cundinamarca vetara la exposición (ya, luego, levantaron el veto).
El caso fue apelado y, finalmente, se hizo justicia: