lunes, 15 de septiembre de 2014

Querido Evo: la letra con sangre no entra



Más de 80 estudiantes de Veterinaria y Zootecnia de la universidad indígena Tupak Katari recibieron castigos físicos y 'lecciones' de "valores y defensa del Estado" en una unidad militar (!). Los castigos físicos consistieron en pisotearlos a la intemperie y lanzarles gases lacrimógenos.

Y todo porque piden autonomía en las universidades indígenas:

El rector de la universidad, Lucio Choquehuanca, opina que a los estudiantes “les hace falta disciplina” y ha juzgado positivo el acuerdo con las FF AA. Ha explicado a la prensa que los estudiantes de la carrera de Veterinaria y Zootecnia son [...] un movimiento para lograr la autonomía. “Esta universidad es la cría de nuestro hermano Evo Morales y eso de la autonomía no se va a dar”, afirma.

Morales, durante una entrega de buses a la universidad quechua en Chapare (a 500 kilómetros al este de La Paz), afirmó el jueves que “no habrá autonomía en las universidad indígenas” y ha sugerido que quienes quieran autonomía que se inscriban en el sistema público universitario.

“Nuestras universidades [las indígenas] tienen que ser totalmente diferentes a las autónomas, con principios bien formados al lado de sus pueblos y no para otros intereses”, aseguró el presidente al diario La Razón.
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La autonomía universitaria implica la total independencia política y administrativa de las casas de estudio del sistema público. Los recursos asignados por el Estado son de libre administración, así como la elección de sus autoridades, la definición de planes de estudio y sus estatutos. Se complementa con el “gobierno paritario” integrado por docentes y representantes estudiantiles para asegurar el ejercicio de la democracia en el acceso a las universidades y en los planes educativos.

Ya sabíamos que Evo tiene ideas muy disparatadas, pero esto se pasa. Morales ha usado el racismo para conseguir tratos favorables y, aunque las políticas de identidad son despreciables y no tienen sentido, el principio operativo es comprensible.

En cambio, dar un trato diferenciado a los indígenas para que no puedan criticar abiertamente el gobierno es una medida autoritaria y represiva... lamentablemente, también característica de Morales.

Deben ser los mismos indígenas los encargados de hacer sus propias narrativas — usarlos para reforzar las tesis del gobierno, privándolos de la libertad de cátedra, es algo más propio del colonialismo.

Eso por no mencionar el hecho de que las universidades son lugares para ir a aprender y cuestionar; la idea de que son aparatos oficiales de adoctrinamiento es más propia de la Italia de los Treinta, que de la cultura indígena, ¿cierto?

(vía Andrés Sánchez | Imagen: Alain Bachellier via photopin cc)

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