Esto por supuesto, le causará agrieras a los relativsitas culturales, pues las mujeres que están empezando a ser tratadas como personas pertenecen a la tribu Embera Chamí, que se está acostumbrando a no rebanarle el clítoris a sus mujeres:
El proyecto 'Embera Werá' (mujer Embera) comenzó desde el año 2007 con el fin de erradicar la práctica de mutilación genital femenina, en la cultura Embera Chamí de Pueblo Rico y Mistrató (Risaralda). Es por eso que, cada 25 de abril se realizan los foros para darle continuidad a este convenio realizado por el Fondo de Naciones Unidas, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), la Gobernación de Risaralda y el Consejo Regional Indígena (CRI).
El cambio de paradigma de la comunidad sucedió, según Esmeralda Ruíz, asesora del Fondo Naciones Unidas, por publicaciones en la prensa internacional, donde se conoció que, en marzo del 2007 llegó al hospital de Pueblo Rico, una Embera Chamí recién nacida, quien murió días más tarde por la práctica de la ablación de clítoris, ejecutada en su nacimiento por parte de la partera.
Por su parte María Consuelo Montoya, directora del Icbf Risaralda aseguró que teniendo en cuenta que la ablación atenta contra la salud y la vida, se tuvo como objetivo promover y sensibilizar sobre el conocimiento y la protección de los derechos humanos, "mientras lográbamos entrar en confianza con la comunidad, se evitó interferir en la autonomía que tiene el pueblo indígena entorno a su cultura, con el paso del tiempos se logró que las mujeres pudieran hablar y trabajar en el tema, donde sus esposos se quedaban cuidando a los niños, mientras ellas aprendían sobre sus derechos y la práctica", indicó.
El gobernador de Risaralda, Carlos Alberto Botero, quien además es médico mencionó la gravedad del proceso, "la ablación de clítoris es peligrosa porque se hace sin la asepsia adecuada, impide el desarrollo sexual y produce infecciones bacterianas complicadas hasta provocar la muerte"explicó el funcionario.
Pero los multicultis no tienen por qué alarmarse del todo. ¡La cosa podría ser mucho peor! Podrían estarle lavando el cerebro a las emberas con los discriminadores preceptos occidentales de que ellas son libres de elegir hacer con su cuerpo lo que les venga en gana. En vez de eso sólo quieren evitar la ablación por cuestiones de asepsia. ¿No les quita eso un peso de encima? ¿No? Bueno, a lo mejor esto se los quite:
La asesora del Fondo de Naciones Unidas reflexionó sobre esta práctica que al parecer, es proveniente del continente africano y fue adoptada por los indígenas de esta región
Ahora los multiculturalistas tienen una excusa para apoyar la erradicación de esta lacra de la cultura embera, al fin y al cabo no es propia de ellos sino que fue una influencia cultural.
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