Ampliarán disparidad pensional

En Colombia, los hombres se pensionan a los 62 años y las mujeres a los 57. Todos deben cotizar 1.300 semanas de trabajo. Evidentemente hay una desigualdad: todos deberíamos pensionarnos a la misma edad, ya fuera a los 62 o los 57 años, independientemente del sexo — de hecho, hace unas semanas, esta patente desigualdad fue motivo de una controversia absurda sobre la jubilación de personas trans.

Ahora, en un giro aún más absurdo de acontecimientos, el senador Mauricio Lizcano presentó un proyecto de ley para que las mujeres coticen menos semanas — todo en nombre de la igualdad:

Un proyecto de ley que busca reducir para las mujeres el número de semanas de cotización a pensión al pasar de 1.300 a 1.150, radicó el senador Mauricio Lizcano este martes en la Cámara de Representantes.

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El congresista manifestó que con esta iniciativa proponen corregir la inequidad existente en el número de semanas que cotizan los hombres y las mujeres en el Régimen de Prima Media del sistema general de pensiones.

Es decir hoy un hombre para pensionarse tiene que tener 62 años y 1.300 semanas cotizados, mientras que una mujer tiene que tener 57 años de edad y las mismas 1.300 semanas cotizadas.

"Luego la mujer tiene menos tiempo para completar estas semanas y por eso los porcentajes de las mujeres son mucho más bajos que las de los hombres, obligándolas a trabajar mucho más de los 57 años o no acceder a una pensión", dijo Lizcano.

Según Lizcano, la brecha de edad (y semanas cotizadas) es una forma de contrarrestar la discriminación laboral que enfrentan las mujeres. O sea, él propone una no-solución, porque este es un problema cultural y de mercado laboral, no de edad de jubilación. Es un poco como si la pareja de Lizcano le fuera infiel por falta de estabilidad y él respondiera a esto nombrándola beneficiaria de su seguro de vida.

La discriminación se combate con igualdad, en vez de más discriminación (y así como no hay sexismo ni racismo positivos, tampoco hay discriminación positiva — eso es un oxímoron). Cada vez somos menos iguales ante la ley — vaya país tan bananero.

(imagen: Alex E. Proimos)