Educación sexual - you're doing it wrong!

Los conservadores sociales siempre consiguen colar en las políticas públicas sus ridículos discursos y planteamientos de los distintos temas sobre los que desvarían.

La educación sexual adolescente no es la excepción. Por ejemplo, en EEUU los programas gubernamentales de educación sexual siempre han sido enfocados hacia la abstinencia. Ahora, un estudio demuestra que ese enfoque provoca un incremento en los embarazos adolescentes, las tasas de natalidad y la transmisión de ETS:

Estados Unidos ocupa el primer lugar en tasas de embarazo adolescente y de enfermedades de transmisión sexual entre las naciones desarrolladas. En un esfuerzo por reducir estas tasas, el gobierno de EEUU ha financiado programas de educación sexual enfocados exclusivamente en la abstinencia desde hace más de una década. Sin embargo, sigue habiendo una gran controversia pública sobre si esta inversión ha tenido éxito y si estos programas deberían continuar. Utilizando los datos nacionales más recientes (2005) de todos los estados de EEUU con información sobre las leyes o políticas de educación sexual (N = 48), demostramos que un creciente énfasis en la educación de abstinencia se correlaciona positivamente con el embarazo adolescente y las tasas de natalidad. Esta tendencia sigue siendo significativa después de considerar el nivel socioeconómico, el nivel educativo adolescente, la composición étnica de la población adolescente, y el acceso a Medicaid para servicios de planificación familiar en cada estado. Estos datos muestran claramente que la educación de sólo abstinencia como política de Estado es ineficaz en la prevención del embarazo adolescente y en realidad puede estar contribuyendo a las altas tasas de embarazos adolescentes en los EEUU. En consonancia con la nueva iniciativa de Prevención del Embarazo Adolescente, que se basa en la evidencia y el modelo del Proceso de Adopción por Precaución defendido por los Institutos Nacionales de Salud, se propone la integración de la educación sexual integral y de enfermedades de transmisión sexual en el currículo de biología en las clases de ciencias de la escuela media y secundaria y un currículo paralelo de estudios sociales que aborden los comportamientos de aversión al riesgo y la planificación para el futuro.

¡Me encanta cuando la ciencia patea el trasero de los retrofachos!

(visto en Scarleteen)