Siempre que yo decía que tal o cual candidato a determinado cargo público tenía un hermano o primo o amigo corrupto, me respondían que la responsabilidad penal es personal. Eso es cierto. Pero también es cierto que la responsabilidad política no lo es.
Siempre consideré que un político no podía ni debía tener familiares ocupando otros cargos de servidores públicos.
Esa sencilla idea hasta ahora se les ocurrió en la Cámara de Representantes:
A pesar de ser una medida que aplaudo me parece que se queda corta. No sólo congresistas. Tampoco ministros ni magistrados ni presidente. Y no sólo alcaldes y gobernadores. Tampoco cónsules y embajadores.
En fin: que por cada familia no debería haber más de un actor en la vida pública nacional, regional o local y que deberían pasar cuatro años antes de que pueda aspirar a más cargos o que un familiar suyo lo haga. Esa sería una medida completa.
Siempre consideré que un político no podía ni debía tener familiares ocupando otros cargos de servidores públicos.
Esa sencilla idea hasta ahora se les ocurrió en la Cámara de Representantes:
Se estableció que quedará prohibido que un familiar de un senador o representante a la Cámara, pueda aspirar a ser alcalde o gobernador.
De tal orden es la restricción que ni siquiera podrá inscribirse para tal designación, quien tenga un familiar congresista.
A pesar de ser una medida que aplaudo me parece que se queda corta. No sólo congresistas. Tampoco ministros ni magistrados ni presidente. Y no sólo alcaldes y gobernadores. Tampoco cónsules y embajadores.
En fin: que por cada familia no debería haber más de un actor en la vida pública nacional, regional o local y que deberían pasar cuatro años antes de que pueda aspirar a más cargos o que un familiar suyo lo haga. Esa sería una medida completa.