A pesar de que estuvo en riesgo, la libertad de expresión fue protegida por el juzgado holandés que llevaba el caso de Geert Wilders por presunta incitación del odio contra los musulmanes.
Si bien no comparto algunas posiciones de Wilders, me alegra hasta el infinito que no haya sido condenado por decir lo que piensa y que esté libre de los cargos por odio:
Si bien no comparto algunas posiciones de Wilders, me alegra hasta el infinito que no haya sido condenado por decir lo que piensa y que esté libre de los cargos por odio: