Hace unos días el crucero Costa Concordia se hundió en las aguas de Italia.
Gracias a las labores de rescate y la rápida acción, se minimizó el número de víctimas. Sin embargo, tanto el presidente Santos como los supervivientes colombianos le agradecieron a dios porque estos últimos no estuvieron entre los muertos del accidente.
Guardando las proporciones (entre un crucero encallado y un carro bocabajo), aquí hay una idea de cómo expresar la gratitud, de forma más realista, por seguir vivos tras un accidente:
Gracias a las labores de rescate y la rápida acción, se minimizó el número de víctimas. Sin embargo, tanto el presidente Santos como los supervivientes colombianos le agradecieron a dios porque estos últimos no estuvieron entre los muertos del accidente.
Guardando las proporciones (entre un crucero encallado y un carro bocabajo), aquí hay una idea de cómo expresar la gratitud, de forma más realista, por seguir vivos tras un accidente: