Esta semana, los cerros orientales de Bogotá sufrieron un incendio que llegó a afectar cinco hectáreas. Los esfuerzos conjuntos de los Bomberos, el Ejército y la Fuerza Aérea resultaron insuficientes, así que la fuerte lluvia del miércoles ayudó a apagar buena parte del incendio.
Fue entonces cuando el nuevo alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, decidió agradecerle a su amigo imaginario por la lluvia: