El año pasado me llamó la atención una publicación en las redes sociales de Colombia Diversa en la que hacían una disparatada asociación entre la población LGBTI y la astrología: ¿Qué personaje LGBTIQ+ eres según tu signo zoodiacal [sic] ?, preguntaba una imagen (sí, "zoodiacal" [?]), y la leyenda del post proclamaba que "Hay pocas cosas más queer en el mundo que la astrología, y nosotras lo sabemos".
Supuse que era una expresión del activismo infectado de posmodernismo, y no le dí mayor importancia: en Colombia, el pensamiento mágico campa a sus anchas, y las organizaciones de derechos no están exentas de adoptar ideologías que suenan chupiguay y que rechazan de plano la existencia de la realidad objetiva (lo que es preocupante si uno se detiene a pensar que no se puede conseguir ningún tipo de justicia sin que primero admitamos que se busca operar un cambio material sobre la realidad) — y así terminan ofreciéndonos estas joyas en redes sociales, asociando la astrología con los derechos LGBTI.
Me había olvidado del tema hasta que en estos días mi amigo Andrés señaló que había una cuenta de Twitter que parecía ser de la Universidad Nacional de Colombia (UNal) en la que se hacían asociaciones similares entre la astrología y los asuntos de género. Pues empecé a tirar del hilo y resulta que más o menos desde mayo de 2024 hay varias cuentas de distintas redes sociales que parecen asociadas a la UNal que están promoviendo esta absurda supuesta relación entre derechos LGBTI y astrología, en lo que han llamado la "campaña del anti-horóscopo". En la dichosa campaña a cada signo le corresponde una supuesta lucha social (anti-racismo, anti-patriarcado, anti-etnicismo, etc), le designan una vela, un ritual, un mantra, y un personaje histórico LGBTI.