El Washington Post (WaPo), le preguntó a Richard Dawkins qué pensaba sobre la tontería esa de que el mundo se acabe este Sábado 21 de Mayo y él da la respuesta perfecta:
Como de costumbre, Dawkins da en el clavo.
¿Por qué está un periódico serio como el Washington Post, dándole espacio a un loco delirante? Supongo que la respuesta debe ser que, a diferencia del lunático promedio, este ha logrado recaudar suficiente dinero para poner en marcha una emisora de radio y pagar vallas publicitarias. No sé de dónde saca el dinero, pero no sería una sorpresa descubrir que es aportado por los seguidores crédulos - bastante crédulos, podemos imaginar, para ir junto con él cuando, inevitablemente, explique, el 22 de Mayo, que debe haber habido algún error en el cálculo, y que el rapto se aplaza para... y por favor envíen más dinero para pagar vallas publicitarias actualizadas.
Por lo tanto, la pregunta es, ¿por qué hay tantos adinerados, crédulos idiotas por ahí? ¿Por qué es que una idea puede ser tan loca como se desee y que aún así estafe a suficientes partidarios como para financiar su publicidad para adquirir aún más partidarios... hasta que finalmente un periódico nacional se da cuenta y lo convierte en un tonto relleno de temporada?
Como de costumbre, Dawkins da en el clavo.
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