jueves, 16 de julio de 2015

Un consejo para contrarrestar magufadas



Un estudio publicado en el Journal of Experimental Political Science encontró que para contrarrestar la desinformación no basta con demostrar que es falsa sino que las personas necesitan una explicación alternativa:

La desinformación puede ser muy difícil de corregir y puede tener efectos duraderos, incluso después de que se desacredita. Una de las razones para esta persistencia es la manera en que la gente hace inferencias causales con base en la información disponible sobre un evento o resultado dado. Como resultado, la información falsa puede seguir influyendo las creencias y actitudes, incluso después de haber sido desmentida si no se sustituye por una explicación causal alternativa. Ponemos a prueba esta hipótesis utilizando un paradigma experimental adaptado de la literatura psicológica sobre el continuo efecto de influencia y encontramos que una explicación causal para un evento inexplicable es significativamente más eficaz que una negación, incluso cuando la negación es respaldada por evidencia inusualmente fuerte. Este resultado tiene importantes implicaciones para la forma más eficaz de contrarrestar la desinformación sobre los eventos y resultados políticos controvertidos.

Como es un journal enfocado en ciencia política, no es de extrañar que los autores especulen sobre las implicaciones que sus hallazgos tendrán en la política, pero la conclusión es extrapolable a otras áreas.

Nunca falta el creacionista o conspiranóico que, tras ver contrarrestada su explicación, responde exigiendo la explicación alternativa — es el mecanismo psicológico que opera detrás del dios de los vacíos, por ejemplo.

Para los magufos que viven de traficar miedo, la explicación alternativa sólo es un hecho incómodo. Pero para sus víctimas, los ingenuos creyentes que sólo buscan darle sentido al mundo que los rodea, una explicación alternativa puede hacer la diferencia entre un conspiranóico más o alguien que empieza a utilizar sus capacidades críticas.

Cuando no tengamos la explicación alternativa, nos tocará conformarnos con explicarles qué es la falacia de apelar a la ignorancia.

(imagen: Pixabay)

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