Pues adivinen quién no está contento. Por supuesto, los fanáticos religiosos que creen que con base en sus creencias pueden cargarse la salud física (y emocional) de un infante. Y ese es el motivo por el que los rabinos europeos se están reuniendo:
La Conferencia de Rabinos de Europa convocó a una reunión de emergencia en Berlín, Alemania, para discutir una decisión de la Justicia que prohíbe circuncidar a los varones jóvenes por motivos religiosos para evitar lesiones corporales, incluso si los padres están de acuerdo.
El presidente de la Conferencia, Pinchas Goldschmidt, dijo en un comunicado el lunes que el fallo del tribunal de la ciudad de Colonia el mes pasado "absolutamente no tuvo en cuenta lo fundamental que es la circuncisión ritual en la fe y la identidad judía”.
Sí, ese precisamente es el punto: el Estado debe proteger a los niños incluso de la estupidez de sus padres.
Y sí: amputarle innecesariamente un pedazo de cuerpo a otro ser humano -mucho más, cuando este no se puede oponer- está mal siempre, sin importar si es o no por motivos religiosos.
Y sí: creer que está permitido si es por motivos religiosos es el privilegio religioso en acción y es una excusa patética.
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